La ansiedad es algo que muchas personas experimentamos, se podría decir que es uno de los «males» que aqueja al mundo de hoy. Vivimos en la era tecnológica, rodeadas de estímulos constantes, con un celular como extensión de nuestro cuerpo, pendientes de las notificaciones de Instagram o del mensajito de WhatsApp.
Necesitamos calmar la mente y el espíritu pero nuestra mente está tan acostumbrada a recibir estímulos que pareciera que bajar un cambio y aburrirse está mal. Nos cuesta el silencio y estar presentes, paradójicamente eso es lo que necesitamos, sentir paz interior y la mente tranquila ✨.
Muchas personas recurren a la lectura de Registros Akáshicos como método anti estrés o anti ansiedad: la realidad es que sí, vivis una experiencia de paz que te ayuda a salir de ese loop lleno de estímulos, pero si no generamos un cambio en nuestro estilo de vida, esa sensación de paz se esfuma a las horas de terminar la sesión.
El cambio lo tenemos que generar nosotras con una constante presencia y disciplina, porque el afuera está creado para entretenernos y generarnos adicción. Por ende, necesitamos ser firmes con algunos hábitos para permitirle a nuestro sistema nervioso regularse y habitar la calma, saliendo del estado de «alerta».
Te comparto 5 recursos que me ayudaron a llevar un estilo de vida en equilibrio:
Meditar. Se que es incómodo dedicarnos unos minutos a meditar si estamos inmersas en un ritmo tan acelerado. Pero ¿Hace falta que toquemos fondo para darnos cuenta de cuánto lo necesitamos y el daño que nos está haciendo ese estilo de vida? Sin dudas al principio te va a costar, pero eso no significa que no sea un camino saludable. Cuando meditamos o practicamos mindfulness estamos sentandonos con nuestros pensamientos, aquellos que estamos tratando de evitar constantemente a través del consumismo. ¿Nos da miedo lo que podamos encontrar? Si. Pero a la hora de hacerlo, es importante que no te identifiques con tus pensamientos, que te permitas observar y dejar ser a tu mente. Con disciplina y constancia vas a sentir una profunda paz.
Tomarme momentos para frenar en el medio de la rutina, aunque sean 5/10 minutos. Frenar y dejar de hacer lo que estaba haciendo para relajarme un momento: ya sea respirando, recostandome, cocinando, observando la naturaleza o saliendo a caminar.
Mover el cuerpo, en mi caso, hacer yoga. Siempre me costó el ejercicio físico, pero encontré en el yoga una práctica amorosa que me permite ir a mi propio ritmo. Arranco el día con un poco de yoga y luego meditación, es una combinación maravillosa.
Observar ¿De qué me estoy nutriendo? en todos los sentidos: ¿Que contenido consumo, que tipo de series veo, con quienes hablo diariamente, con qué me estoy alimentando? e ir haciendo una limpieza, tomar mayor control en ese «consumismo». En instagram, hago recurrentemente una limpieza de cuentas que me generan ansiedad, y sigo personas que llevan una vida tranquila. Escucho podcast como «Querido Pedro» sobre llevar una vida minimalista.
Hacerme amiga de la incomodidad: constamente buscamos el camino más fácil. Y a veces no es el más saludable. Llevar una vida consciente y cultivar el equilibrio, la lentitud y la salud, implica sentarnos a respirar – muchas veces al día – la incomodidad, el aburrimiento y el vacío. ¡Y está bien que así sea! Porque la vida está llena de silencio que llenamos constantemente con ruido, y es muchas veces el silencio que necesitamos para descansar en movimiento. No me malinterpretes, yo amo la adrenalina de estar viva: ¡Sentir que pasan cosas increibles todos los días! Pero te cuento un secreto: atravesando la incomodidad y alcanzando una paz interior: la vida se vuelve una maravilla constante. Re-conectamos con la alegría de estar vivas, nuestro estado esencial. Somos capaces de reconocer los milagros que nos rodean, y de recibir mucha abundancia porque hay espacio en nuestro interior.
¿Estas dispuesta a vivir una vida en paz?
De regalo y para aportar a tu camino te dejo un Video-Regalo “Despierta tu poder” en el cual vas a encontrar una meditación y ejercicios que te ayudarán a conectarte con tu interior 💜
Calu